miércoles, 30 de septiembre de 2009

Agosto del 2006


St. Lucía W.I.


11 de Agosto 2006. Me encontraba en esa bella isla en fiel cumplimiento de mis labores como Project Manager de la construcción del proyecto Cap Maison. Un hermoso hotel boutique de 22 villas en un acantilado impresionante sobre una playa hermosa y escondida, de arenas finas y aguas cristalinas llamada Smugglers Cove.


Aquel día transcurrió normal, como los demás días, entre emails, llamadas y multiples gestiones que nos permitieran empujar la obra en construcción adelante. Me preparaba para el Site meeting, una reunión mensual con los propietarios, el supervisor, consultores y demás personas implicadas y relacionadas al proyecto, esta reunión se realizaría el miércoles 15 de Agosto. Era uno de los acontecimientos más importantes en lo que a la gestión y construcción del proyecto se refería y difícilmente podía ser cambiado de fecha ya que personas viajaban desde Inglaterra y U.S. solo para asistir a esta reunión. Una vez pactada la fecha de esta importante cita era casi imposible cambiar la misma. Hacerlo implicaba cambiar los itinerarios de muchas personas y en cierta forma aplazar las gestiones y soluciones a situaciones criticas y de gran importancia del proyecto que esperaban decisiones de esta reunión.


En mi vida una nueva etapa gestaba su inicio, ahora en Agosto del 2006, habían pasado 9 meses desde aquel día en noviembre del 2005 en la "Casita de la concepción" en la isla de Nevis W.I. Mi primogénita estaba a punto de nacer.


Según la ciencia mi pequeña vería la luz del mundo el 27 de Agosto del 2006, pero ni la ciencia ni los conocimientos y pericia de médicos pueden cambiar el curso de las cosas de la vida, las formas en que actúa Dios y la naturaleza que ha creado.


Aquella tarde fui informado que no nacería en la fecha prevista. Recuerdo la incertidumbre que me abrumó al saber que mi pequeña empujaba en las entrañas de su madre para salir al mundo. Solo pensaba, no podré presenciar su nacimiento y todo se lo debía a este deber que me ocupa. Yo ya había hecho mis planes y arreglado todo para partir el 24 de Agosto, mucho después de la reunión y tiempo antes de su calculado nacimiento pero la vida me jugó una partida que entonces no comprendía, no tenía porqué tampoco.


Cayó la tarde entre llamadas para estar enterado de todo lo que ocurría en Santo Domingo, en principio no había seguridad de que efectivamente se había presentado la hora final, esto aumentaba mi incertidumbre.


Luego ya entrada la noche, recuerdo que llamé a mi padre y este me informó que estuviera preparado porque al parecer mi hija iba a nacer. No sabía como tomarlo, no me esperaba esto. Recuerdo que pensé impulsivamente en tomar un avión al día sguiente.


Las horas pasaron rápidamente y en un abrir y cerrar de ojos dieron las 12:00 Am, recuerdo que me fui a mi casa en Gate Park, Cap Estates a comer algo y descansar un poco, luego mas tarde me levanté y dejé una nota sobre la mesa a mi compañero entonces Gerente administrador del proyecto Fernando Forteza, donde le decía que estaría en la oficina para estar comunicado pues mi hija iba a nacer, aun conservo esa nota.


Mi padre me mantenía informado me decía que era cuestión de esperar pero no me daba muchos detalles tal vez para no preocuparme. Estuve despierto casi hasta las 6 am hasta que me dormí en uno de los muebles de la oficina y luego me regresé a la casa a desayunarme y vestirme para el nuevo día de trabajo.


A eso de las 7 :30 Am mi padre me llamó y me dijo: "Ya nació". Recuerdo que mis ojos se aguaron y mi felicidad fue idescriptible. Mi padre empezó a contarme con detalle como la escuchó llorando cuando la llevaban a la sala de infantes y luego me dijo fue una cesaria, todo está bien.


Ese día 12 de Agosto del 2006 trabajé arduamente, me tome fotografías, y fue un día soleado con brisas, recuerdo que ese día despegabamos la tela sintética de la cancha de tennis existente para iniciar la construccion del Back Of House building y yo en forma chistosa me puse a barrer con un gran escobillón mientras mis compañeros me tomaban fotografías diciendo ya eres papá tómate fotos para que vean que estabas trabajando! Hacían chistes del tema pero era una sensación extraña de felicidad con la insatisfacción de no haber podido estar presente en su nacimiento.


Aquel día y en los posteriores a todo el mundo que conocía le contaba de mi alegría. Mucha gente que no he vuelto a ver, algunos tal vez no los vuelva a ver nunca más en mi vida, pero necesitaba compartir mi alegría aun fuera con extraños.


Fue un día hermoso en St. Lucia, pero lo fue mas en mi corazón, había nacido la que en lo adelante sería mi razón mas grande de lucha, esfuerzos y sacrificios. Y la que traería a mi vida el mas grande amor, puro, ingenuo e imperecedero.


El 15 de Agosto asistí a la mencionada reunión y antes de iniciar la misma recibí unas gratas felicitaciones de los propietarios del proyecto así como del consultor y demás personas que asistieron. Me dí cuenta que había pasado a un escalafón mas alto en la vida.


Al día siguiente partí a Santo Domingo, mi padre me recogió en el aeropuerto y fuimos directamente a la clínica. Conocí la criatura mas bella que mis ojos hayan visto alguna vez. La sostuve en mis brazos y mis ojos se aguaron como perlas en una concha. Isabella Barros Maldonado. Mi hija ahora reposaba en silencio en mis brazos, aquella mañana en la casita de la concepción en Nevis vino a mi mente y pensé, ya estás aquí, mi hija!


El deber me esperaba, 4 días mas tarde debía partir a la isla de St. Lucia, donde obreros, contratistas, problemas de toda indole y muchas responsabilidades estaban a punto de ebullición.


No sabe uno porque algunas cosas en la vida suceden de cierta forma y el porque de alegrías efímeras, pero en parte, estar lejos de mi primogénita durante su nacimiento y en las circunstancias que me encontraba, durante el primer año de su vida, me preparó emocionalmente para el destino inevitable que me esperaba.


Solo el paso del tiempo nos hace comprender porque los hechos suceden de una forma y no como deseamos que sucedan, porqué hay semillas que no germinan en tierra fértil y porque existen oasis en los desiertos, solo al mirar hacia atrás nos damos cuenta.


Esa parte de mi que habia llegado a este mundo cuando yo realizaba ese taller de vida, esa prueba de tiempo, distancia y luego de desengaños, logró en mí desarrollar el amor mas grande y puro, ese que trasciende las distancias y las circunstancias adversas, lo derrota todo y enmudece a muchos dejandoles sin discurso.


Ese amor y su alegría vivirá en mí por siempre esté donde yo esté, ya no hay alegrías efímeras, ese amor eterno vino al mundo y a mi vida aquel 12 de agosto de 2006.


Paul Barros.

5 comentarios:

  1. Excelente!!! Recuerdo como hoy cuando te felicite en la oficina antes de escuchar al Ing. D decir: te va a gustar...
    Recuerdo que llegue a St. Lucia el 26 de Agosto 2006 y ese mismo dia me ensenaste fotos de Isabella. Podia decir que eras el ser mas feliz del mundo.

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  2. Pues si mi estimado, aun esa felicidad permanece como el primer día y aumenta sin decir ya no quepo aquí dentro. El corazón humano es mas grande espiritualmente y emocionalmente hablando que cualquier otra cosa de la creación porque se llena de amor y aun después de la vida.

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  3. Gracias Geisel por siempre por compartir los verdaderos momentos y darle significado como yo.

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  4. Wow eres muy bueno escribiendo ..hermosas palabras. Se nota todo el amor que sientes por tu hija.. proud daddy! No estuviste con ella en su nacimiento pero haz estado ahi durante todo estos anos...ojala Isabella pueda leer esto cuando sea mas grande ..se va sentir muy orgullosa de ti..

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